RESCATE SIN COSTE

Mis últimas ráfagas de oxígeno me piden un tiempo a solas
pero solo duro cinco minutos.
Tengo miedo a tardar demasiado y que no estés
y no voy a dejar de marchar por ello,
si lo hago será por cualquier otro miedo hermano.

El día que llegué a este limbo me sentí extraña
y aunque allí hiciera frío por la confusión
no tenía intención de encontrar el camino de vuelta.
Ahora me conozco esto de memoria:
vienes de visita y me sobras pronto,
(o en eso concluye mi espirómetro)
después marchas y te diría "quédate" o simplemente me uniría.
Pero no digo nada nunca,
tu siempre regresas
y yo cada vez pierdo más la forma
igual que este lugar.

Los días que no me medico para la paciencia
los sufres.
Y los dos sabemos que pinchar dos veces en el mismo punto,
duele.
Lo sabemos y no tenemos otra forma de aguantar...
Yo la pierdo rápido
y a ti te cuesta recuperarla cada vez más.

No me gusta este empate
y se suman las veces que ignoro la utilidad de una prórroga.
Va a quedar igual si nadie toca la pelota
y yo hace tiempo que jodo las estadísticas fallando cada chute.

Sácame del limbo,
lo tengo medio claro...
Sácame y no vuelvas a callar,
he pasado por muchos silencios aquí.

—Lia Versarte


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