SÚBITO

No es por falta de ganas
sino por exceso de miedo.
No sabré aguantar la mirada,
la cobardía reside tras mi ego.
Otra vez después de dos semanas
y esta última no le he buscado,
estaba con quien quería 
conseguí no pensarle tanto
y de nuevo mañana llega el día.
Sé que si cancelase nuevamente 
aún sin quererlo me dolería,
me haría las mil paranoias,
no descansaría. 
Pero soy contradictoria 
y lo que noto es no querer un mañana,
me ha entrado la tontería 
y creo que nadie la para.

Me falta algún tipo de seguridad,
saber que voy a estar cómoda 
y nada va a salir mal.
Me estresa el misterio
me agobia saber que no hay plan, 
aún sigo dándole vueltas 
al dónde vamos a cenar.
Tú improvisarás sobre la marcha
y yo continuaré sin más.
Supongo que al final iremos a tu casa
y allí sabemos lo que suele pasar.

Puede que tenga miedo al silencio,
a la respuesta que no se da,
a la mirada que pide a gritos
levantarse del sofá.
Pero nunca soy yo
no me gusta invadir 
siempre espero a que él 
se decida a venir.
Aunque sea siempre con una excusa
aun sin poder evitar reír,
aún sabiendo que nos sobran motivos
para cerrar los ojos y sentir.

Tal vez sepa que quedan dos noches,
que entre semana hay más riesgo,
que los jueves són importantes
y se convierten en más serios,
lo bueno de los fines de semana
es que nos regalan fiesta y nos roban tiempo.
Tendremos que hablar y aun no lo conocemos,
dudo que podamos llegar
a tener la intención de entendernos.
Puede que sea así,
tal vez sí sea cierto
que nos queden dos veces más 
para ir a ver nuestro entierro.

Y ya no tendré nada,
las cosas empezarán de nuevo.
Porque la verdad es que solo hay uno
uno solo al que quiero
y su caso es distinto,
yo me alegro gratamente por ello,
pero auguro un futuro complicado 
por el cual evitaré baches y agujeros.
Él tendrá dos rutinas con estabilidad
yo acabaré bañándome en hielo,
buscando algún oasis
en el medio del desierto.

Pero estoy bien,
no he dejado de sonreír.
Sé que soy un caos que fluctúa 
y que tienta al porvenir.
Esta noche ha sido buena,
todo tiene que existir:
Los sentimientos conviven en harmonia 
y a veces les dejamos salir.

-Lía VersArte