COMO UN CUADRO DE COURBET

¿Cómo te atreves a hablar de magia tras esta noche?
Polvos de fantasía,
cantos de sirena,
espadas que acarician sin dejar corte.

No conspires más,
no le des ahora la vuelta al mundo.
Te digo yo que tus paredes supuraban humo.
Lo mundano puede ser lo más profundo.

Lo bueno de tener pocos lunares
es que te los aprenderás de memoria.
Y un día me dejarás un:
"sé que tienes una estrella en el pecho"
y yo sumaré un punto a favor de tu victoria.

Por mi espalda pasó todo el deseo del mundo en forma de caricias
y lo saciabas con el vicio entre labios.
Solo te faltaba artista retratándote,
yo estaba ocupada reprimiendo mi hambre al mirarte.
Pecar es muy fácil,
resistir es de sabios.

Te regalaría una poesía
pero creo que prefieres esta declaración de guerra.
Te aviso que el asalto será nocturno
y que cuando libere a la bestia
será difícil detenerla.

Después hablaremos mirando el cielo de tu habitación,
nombraremos películas de culto
junto a un par de tecnicismos
y acompañará cualquier banalidad.
Que quede bien clara nuestra alineada imperfección.

Duermes
y yo sonrío pensando en nuestro Big Bang creador.
Si alguien nos busca,
estamos al fondo,
en la segunda constelación.
Pero,
puede que cuando llegue
nos hayamos mudado a un lugar mejor.

—Vers[Arte]

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