"Además últimamente siempre estoy en mi peor momento.
No te preocupes por mí,
por un instante crucé al otro lado y luché con esas bestias gigantes"
—Leiva, No te perocupes por mí
La niña solo sabe ver cuando cierra los ojos
y oír cuando grita y se vacía.
Él tenía que marcar sentencia para que ella viera el peligro,
sino ya iba de cabeza a destrozarlo todo.
"Para.
De tus mares y lo que ahogan has hablado.
Hablado de más y agotado los recursos hasta tener que inventar nuevas palabras que te comprendan.
En esa escena también hay sol, arena, aire...
y alguien al que estás ahogando por sobrevivir tú.
Te intento ayudar pero al final noto que eres tú que tiras hacia abajo.
Te hundes y no sueltas mi mano.
Me entra agua en los pulmones y no me sale por los ojos como a ti.
Ve hacia la orilla si aún no sabes nadar
y todo nos será más fácil cuando vuelva."
La niña sentada en la arena
al verle soñaba con bucear.
.
Comentaris
Publica un comentari a l'entrada